Priego de Córdoba no solo es un tesoro cultural y patrimonial, sino también un paraíso para los amantes de la buena mesa. Su oferta gastronómica es tan rica y variada que cada bocado se convierte en una experiencia inolvidable. Comencemos nuestro recorrido culinario con el protagonista indiscutible de la región: el aceite de oliva virgen extra (AOVE).
El Oro Líquido de Priego
Priego de Córdoba es famoso por su aceite de oliva virgen extra, reconocido mundialmente con la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Priego de Córdoba. Este AOVE no solo enriquece cada plato con su frutado intenso y notas de tomatera y hierba verde recién cortada, sino que también aporta beneficios para la salud, como propiedades anticancerígenas y antioxidantes. Entre los muchos aceites excepcionales, destaca el Legado Español por su sabor afrutado y delicadeza, perfecto para acompañar joyas gastronómicas andaluzas como el jamón de bellota de Jabugo o los vinos de Montilla-Moriles.
Vinos de Montilla-Moriles
Hablar de la gastronomía de Priego es también hablar de sus vinos. Los vinos de Montilla-Moriles, con su diversidad y riqueza, son el complemento ideal para cualquier comida. Desde un joven blanco, pasando por un fino de 8 años, un amontillado de 50 años, hasta un oloroso de 25 años o un dulce Pedro Ximénez, cada copa es una celebración de la tradición vinícola cordobesa. Estos vinos maridan a la perfección con platos como verduras, caza y postres.
Platos Típicos y Restaurantes
La cocina de Priego es una mezcla de tradición y sabor, con recetas que han pasado de generación en generación. En el Restaurante Río, abierto desde 1955, puedes degustar el auténtico salmorejo de fresas, remojón de naranja con bacalao, ajo y pan de higos, o medallones de rabo de toro deshuesados. Manuel, su gerente, te recibirá con la hospitalidad y profesionalismo que caracterizan a los locales.
Otro lugar destacado es el Hotel Huerta de las Palomas, donde el AOVE es el ingrediente estrella en platos como el bacalao al horno y el helado de AOVE con turrolate. Para los más atrevidos, el gastrobar Zyrah ofrece una experiencia moderna con sus croquetas de arroz negro y alioli, canelones de carrillera ibérica y saquitos de bacalao.
Dulces y Postres
La repostería de Priego es igualmente irresistible. No puedes irte sin probar el turrolate, una delicia de cacao y almendras, ideal para acompañar un buen "hoyo" de pan con aceite local. Otros dulces tradicionales incluyen pestiños, empanadillas, piñonate, cuajado de almendras, y el polvorón de almendra, cada uno con su historia y sabor único.
Oleoturismo y Tradición
La gastronomía de Priego es un reflejo de su historia y cultura. Los platos tradicionales como los flamenquines, rabo de toro, cazón en adobo y revuelto de collejas son una invitación a saborear la esencia de esta tierra. La tradición continúa en la elaboración de productos derivados de la matanza del cerdo, como la morcilla de sesos, los asientos de lomo y los chicharrones. En carnaval, no te pierdas el relleno, una mezcla de carnes servidas como fiambre frío, testimonio de una rica herencia gastronómica.
Vive la Experiencia Gastronómica en Priego de Córdoba
Priego de Córdoba es un destino que deleita los sentidos con sus aromas, sabores y texturas. Sus zumos de aceituna, su oleoturismo, y sus platos estrella tanto dulces como salados, te harán vivir una experiencia culinaria incomparable. No olvides llevar contigo el recetario "Entre olivares", donde podrás descubrir y recrear las maravillas de esta cocina tradicional y auténtica.
¡Te esperamos en Priego de Córdoba, donde cada comida es una celebración y cada plato, una obra de arte!