La primera agrupación de necrópolis dolménica en la Costa del Sol constituye un valioso testimonio arqueológico de la región. Esta formación está compuesta por varias estructuras revestidas y cubiertas por losas de piedra, conocidas como ortostatos, que albergan los restos de decenas de individuos y sus depósitos funerarios. Entre los hallazgos encontrados en estos sepulcros se incluyen vasijas de cerámica, puntas de flecha, hachas pulimentadas y adornos personales, revelando aspectos significativos de la cultura y las prácticas funerarias de la época.
En el periodo de transición entre la Edad del Cobre y el inicio de la Edad del Bronce, estos sepulcros fueron utilizados para depositar dos enterramientos individuales en su interior y entorno inmediato. Los objetos descubiertos en estas tumbas, como platos y cuencos de barro cocido, así como objetos metálicos, incluyendo una espiral de oro, ofrecen pistas sobre la estructura social y las diferencias de estatus dentro de la comunidad, probablemente relacionadas con el género y el linaje.
El descubrimiento de esta necrópolis tuvo lugar durante los trabajos de investigación realizados en el contexto de la construcción de la autopista de peaje AP-7 en la Costa del Sol, específicamente en el tramo Estepona-Guadiaro. La importancia del hallazgo llevó a tomar medidas para preservar estos vestigios arqueológicos, y entre 2001 y 2002, los cinco sepulcros megalíticos fueron desmontados y reubicados en el parque de San Isidro Labrador. Estos dólmenes se integraron en un Centro de Interpretación, donde se ha reconstruido la topografía del yacimiento y se exhiben los sepulcros en su posición original.
El Centro de Interpretación proporciona información detallada sobre el descubrimiento, la investigación y la reconstrucción de las prácticas funerarias llevadas a cabo en este sitio arqueológico, a través de paneles explicativos y vitrinas que muestran los objetos encontrados y su contexto histórico. Esta iniciativa contribuye significativamente a la comprensión y apreciación del patrimonio arqueológico de la región.