La Torre del Oro es una torre defensiva del siglo XIII desde la que se extendía una gruesa cadena hasta la otra orilla del río, para así cortar el paso a los buques enemigos.
Esta torre, albarrana, de 36 m de altura y situada en el margen izquierdo del río Guadalquivir, posee tres cuerpos: los dos primeros son dodecagonales, el primero erigido por los almohades mientras que el segundo fue edificado por Pedro I el Cruel. El tercer cuerpo es cilíndrico y rematado con cúpula, fue erigido en el siglo XVIII. La torre defendía la entrada fluvial hacia el Puente de Barcas y, por tierra, el acceso al Arenal con su actividad industrial. Esta torre se unía a la Torre de la Plata a través de unos lienzos de muralla llamado coracha que a su vez lo hacían con el Alcázar.
En 1944 se inauguró en el interior de la Torre del Oro el Museo Naval para lo cual trasladaron 400 piezas del Museo Naval de Madrid. El museo se distribuye en dos plantas visitables y una terraza panorámica, con recuerdos de la historia de la torre y el puerto de Sevilla en época árabe, su importancia en la reconquista de la ciudad, el puerto la puerta del Nuevo Mundo, el ocaso del puerto y la Sevilla Contemporánea.
Antes de ser museo, el monumento fue usado como capilla, prisión de nobles, almacén de pólvora, oficinas de la Capitanía de Puerto y Comandancia Naval.
Constituye, junto con la Giralda, uno de los símbolos más representativos de la ciudad de Sevilla. Fue declarada monumento histórico-artístico en 1931.