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Iglesia de San Antonio de Padua

El diseño de la iglesia sigue una planta basilical clásica, con tres naves separadas por arcos de medio punto que se apoyan sobre robustos pilares. Las bóvedas de medio cañón y aristas que cubren las naves contribuyen a la majestuosidad del espacio interior, que se caracteriza por una atmósfera de serenidad y recogimiento. Un detalle especialmente notable son los dos campanarios octogonales que flanquean la fachada, adornados con tejadillos de teja morisca, que añaden un toque distintivo a la silueta del edificio.

En su interior, la iglesia guarda un tesoro espiritual: la pila bautismal donde fue bautizado Fray Leopoldo de Alpandeire, un fraile capuchino muy venerado en España, conocido por su vida humilde y devota. Este detalle convierte a la iglesia en un lugar de peregrinación para muchos fieles.

Un aspecto fascinante de la iglesia es el antiguo cementerio que se encuentra en sus sótanos. Este espacio alberga los cuerpos momificados de un matrimonio que, según la tradición, colaboró en la construcción del templo, dejando así su huella permanente en la historia de Alpandeire.

Visitar la Iglesia de San Antonio de Padua no es solo una oportunidad para admirar su arquitectura y su arte sacro, sino también para conectar con la historia profunda y las tradiciones religiosas que han dado forma a la vida de esta comunidad andaluza

Precios

Adultos

Gratis

Niños (3-7años)

Gratis

-2 años

Gratis

C/ Nombre de la calle nº0 0000, Población, Ciudad