Su emplazamiento estratégico le permitía dominar la Vega de Vélez y gran parte de la Axarquía, lo que lo convirtió en un bastión crucial para los musulmanes. Con la conquista cristiana, el castillo pasó a desempeñar varias funciones, siendo utilizado como casa real, capitanía general, cárcel y cabildo.
Durante la invasión francesa, entre 1808 y 1810, el castillo fue reformado. Sin embargo, en la retirada francesa, amplias zonas fueron destruidas para evitar que el enemigo las utilizara. Tras perder su función militar, el castillo fue en gran parte demolido y excavado para la obtención de cal, lo que contribuyó a su deterioro.
A principios de la década de 1970, se emprendieron trabajos de reconstrucción de la Puerta Real y la torre del homenaje, que junto con la Puerta de Antequera, eran de las pocas estructuras que aún se mantenían en pie.
Descripción del Castillo
El Castillo de Vélez-Málaga comprendía un recinto amurallado de 1500 m², adaptándose al terreno para facilitar su defensa natural. Los muros originales que aún se conservan datan de los siglos XIII y XV y están construidos con tapial de cal y arena, revestidos exteriormente por hiladas de mampostería y verdugadas de ladrillos. Este método de construcción refleja las técnicas arquitectónicas de la época y proporciona una idea de la solidez y la resistencia del castillo.
La Puerta Real, con su distintivo arco de herradura, es una entrada emblemática que refleja la influencia islámica en la arquitectura del castillo. La torre del homenaje, de gran altura y planta cuadrada, es otra estructura destacada que simboliza la importancia militar y defensiva de la fortificación.
Visita al Castillo
Hoy en día, el Castillo de Vélez-Málaga ofrece a los visitantes una oportunidad única para explorar un sitio cargado de historia. Desde sus alturas, se pueden contemplar impresionantes vistas panorámicas que abarcan la ciudad de Vélez-Málaga y sus alrededores, brindando una perspectiva única de la belleza y la historia de la región. La combinación de su rica historia y su ubicación estratégica hace del castillo un lugar fascinante para cualquiera que desee conocer más sobre el pasado andalusí y cristiano de la comarca.