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Calles de Jubrique

Descubre Jubrique: Un Paseo por Historia y Naturaleza

Comienza tu aventura saliendo por la encantadora calle Algatocín, donde la carretera te llevará hacia la vecina localidad que lleva su nombre. A tan solo un kilómetro, un carril asfaltado se bifurca a tu derecha. Sigue este camino durante 500 metros y verás cómo el paisaje cambia a medida que asciendes, hasta llegar a la Ermita de la Santa Cruz del Chorrillo. Este lugar, en honor a la Virgen de Fátima, es el corazón de una de las celebraciones más queridas de Jubrique, donde en mayo se lleva a cabo una romería llena de fervor y devoción.

Al continuar por el carril, rodeado de olivos y chaparrales, llegarás al pueblo. Justo antes de entrar, el camino se bifurca nuevamente; elige la ruta que sigue ascendiendo y pronto te encontrarás con la Fuente Armona, un lugar histórico que alguna vez abasteció de agua a toda la población. Aquí, la brisa fresca y el murmullo del agua te invitarán a una pausa reparadora.

Siguiendo el sendero, cuando comience a descender, te toparás con la Ermita de La Llanada, también dedicada a la Santa Cruz. Reconócela por la fuente que la acompaña, un hermoso rincón que invita a la contemplación.

Desde aquí, descenderás por la pronunciada cuesta de La Angarilla, que te llevará hasta la carretera que conecta Jubrique con Estepona. Recorrerás esta carretera durante 700 metros hasta llegar a la Ermita del Castañuelo, otra joya en honor a la Santa Cruz, donde la fe local se hace palpable.

Para regresar a Jubrique, toma la vereda a la izquierda de la carretera, a unos 30 metros de la ermita. Este camino desciende rápidamente hasta el emblemático Río Lavar, el antiguo lavadero público del pueblo. Aquí, podrás ver a lugareñas con cántaras, evocando una tradición que perdura en el tiempo.

A medida que sigas el sendero, disfrutarás de una suave ascensión que te llevará de nuevo cerca de La Angarilla, pero esta vez opta por la calle La Cruz. Este camino te conducirá a la Plaza de Andalucía, donde se erige la Iglesia Parroquial en honor a San Francisco de Asís. Este monumento, asentado sobre una antigua mezquita árabe, es un testimonio de la rica historia de Jubrique y sus múltiples transformaciones a lo largo de los siglos.

Continúa tu recorrido por las pintorescas calles Altillo y Ánimas, hasta llegar a la calle Pradete. Aquí, la arquitectura tradicional andaluza te abrazará con sus algorfas y adarves, vestigios de la influencia árabe que aún perdura en la esencia de Jubrique.

Precios

Adultos

Gratis

Niños (3-7años)

Gratis

-2 años

Gratis

C/ Nombre de la calle nº0 0000, Población, Ciudad